El diagnóstico precoz de la sordera es el elemento fundamental para definir el pronóstico educativo y de
inclusión del niño sordo, ya que permite aprovechar el periodo crítico de su desarrollo, que ocupa los tres
o cuatro primeros años de vida.
El objetivo de las pruebas de audición es el poder identificar una pérdida de audición y monitorear la
capacidad auditiva del niño, VERIFICAR si la pérdida auditiva se mantiene estable o ha cambiado.
Existen diversos tipos de pruebas de la audición, algunas de las cuales pueden utilizarse a cualquier edad, mientras que
otras se escogen según la edad de su hijo, su capacidad de comprensión y su nivel de desarrollo.
Es importante tener en cuenta la edad, porque el niño debe estar preparado según su nivel de desarrollo:
Las pruebas para monitorear son MUY IMPORTANTE porque son especificas por oído y por frecuencia y nos ayudan a poder adaptar y programar los audífonos. Hay 3 pruebas muy importantes y considero que debería ser la batería de evaluación audiológica para niños antes de los 3 meses:
Es una prueba corta que ayuda a filtrar niños con problemas de tipo neurosensoriales. Las EOAs corresponden a la medición de la actividad de las células ciliadas externas de la cóclea, permitiendo evaluar la función coclear pre-neural entre las frecuencias de 500 y 6,000 Hz. Todo paciente que “no pasa” la evaluación, se refiere para Potenciales Auditivos – para establecer el diagnóstico.
Es una nueva técnica de exploración de la audición que es más especifica en frecuencia que los PEATC o ABR en respuesta al estimulo usando el click. Es una prueba extremadamente importante porque nos permite obtener umbrales de audición en ambos oídos, para poder usar estos valores para programar audífonos pediátricos
Es un estudio electrofisiológico que evalúa la función auditiva del VIII par craneal en su trayecto por el tallo cerebral. No es un estudio que usa estímulos selectivos por frecuencia, el tipo de estímulo es un click que estimula toda la cóclea sin ser selectiva en frecuencia. Por lo tanto, este examen NO se puede usar para determinar umbral de audición ni programar audífonos.
Luego tenemos otras pruebas audiológicas pediátricas muy importantes, que son mas subjetivas, pero igualmente tienen una gran importancia clínica:
se realiza de 0-6 meses en donde el bebé responde a sonidos suaves producidos por un audiómetro. El niño responde tras giros de su cabeza en dirección a la fuente del sonido.
se realiza en niños de 24-60 meses; el niño responde a sonidos producidos por un audiómetro. El niño responde al sonido con respuesta verbal, señalando una imagen, levantando la mano o a través de un juego.
Se realiza en niños mayores de 5 años, en donde el niño responde más confiablemente a los sonidos suaves por un audiómetro. El niño responde al presionar un botón o levantando la mano cuando escucha el sonido.